El dolor de pecho es un síntoma que debe ser manejado con precaución por que puede estar relacionado a enfermedades potencialmente mortales (infarto cardíaco, disección o lesión de la aorta, coágulos en los pulmones o colapso pulmonar).
Afortunadamente no siempre el dolor de pecho es por enfermedades graves.
La causa más frecuente de dolor por enfermedad grave es la angina o infarto cardíaco. Habitualmente se percibe como dolor o malestar con sensación de opresión ("congoja") o "gases" en el pecho más sudoración, falta de aire o desmayo. El malestar se irradia al cuello, mandíbula a uno o ambos brazos y los síntomas están relacionados a actividad física o estrés emocional. Suele durar de 1-5 minutos y presentarse Intermitente hasta que se vuelve constante.
Los dolores que no están relacionados a enfermedades graves habitualmente son de pocos segundos (piquetes) que aumenta al apretar con los dedos el sitio del dolor, o que empeora con la flexión de los brazos o del tórax. Y un dato importante es que el dolor mejora con el ejercicio o esfuerzo.
Las características del dolor ayudan a identificar las causas de dolor de pecho, pero habitualmente se requieren realizar algunas pruebas y exámenes para confirmar el diagnóstico.
Actualmente usted no tiene datos clínicos para considerar que este en riesgo inminente y las probabilidades de que su dolor esté relacionado a una condición que amenace su vida es bajo. Por esta razón le indico medicamentos, solicito exámenes y le recomiendo cuidados a seguir en su domicilio. Pero debe estar atento si el dolor presenta cambios o alguno de los signos de alarma, si esto sucede debe de acudir a valoración e incluso si es necesario acudir al servicio de Urgencias.
SIGNOS DE ALARMA:
El dolor empeora o cambia de características.
El dolor causa dificultad para respirar o se acompaña de sudoración generalizada, o sensación de náuseas y vómito.
El dolor se agrava al caminar o al subir escaleras y usted nota que cada vez se esfuerza más para realizar las actividades que habitualmente desempeña.
Si los accesos de dolor se acompaña de debilidad, mareo o le causa sensación de desmayo.
Firmado: Dr. Roberto V Nandayapa
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